La Primera Presidencia de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha publicado un mensaje de Navidad de 2018:
Nuestro Salvador, Jesucristo, nos ofrece cuatro dones incomparables — la capacidad de amar a los demás, la capacidad de perdonar, la bendición del arrepentimiento y la promesa de la vida eterna. Estos cuatro dones únicos nos traerán más y más gozo a medida que aceptamos y actuamos sobre ellos. Ellos fueron hechos posibles porque Jehová condescendió a venir a la tierra como el niño Jesús. Nació de un padre inmortal y de una madre mortal. Nació en Belén bajo las más humildes circunstancias. El suyo era el nacimiento santo previsto por los profetas desde los días de Adán. Jesucristo es el regalo trascendente de Dios — el don del padre para todos sus hijos. Celebramos gozosamente su nacimiento esta temporada navideña.
Russell M. Nelson
Dallin H. Oaks
Henry B. Eyring