Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
El reconocido streamer español Ibai Llanos organizó el “Mundial de Desayunos”, un evento digital que reunió lo mejor de la gastronomía matutina de distintos países. Bolivia alcanzó las semifinales con la tradicional salteña y el api con pastel, cautivando a propios y extraños.
Más allá de la competencia, este certamen generó entusiasmo entre los bolivianos y también recuerdos entrañables en cientos de misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Durante su servicio en Bolivia, descubrieron estos sabores y los incorporaron entre sus preferidos.
“En mi país los desayunos son diferentes, pero aquí aprendí a disfrutar de la salteña. Ahora siempre la recordaré”, expresó la hermana Aguayo, de Argentina, junto a su compañera, la hermana Cortés, de Colombia.
“El api con pastel fue para mí una revelación. No solo es delicioso, sino que me hace pensar en la calidez de las familias bolivianas que me lo ofrecieron con cariño”, comentó el élder Porras, de Estados Unidos, acompañado de su compañero, el élder Villegas, de Perú.
El Mundial de Desayunos no solo fue una competencia entre países, sino una oportunidad para celebrar la diversidad cultural y la unión a través de la gastronomía. En Bolivia, la experiencia culinaria se convierte en un recuerdo imborrable para quienes la descubren.
Aunque el país no obtuvo el título, conquistó el corazón y el estómago de quienes probaron su desayuno típico. Los sabores bolivianos se transforman en un puente de amistad, gratitud y memorias duraderas que acompañan a los misioneros cuando regresan a sus países de origen.
Perú fue el ganador de esta competencia, disputada en la final contra Venezuela. Más allá de los resultados, los misioneros que sirvieron en estos países recordaron sus años de servicio y la riqueza de su gastronomía.