Gracias a un programa especial, el coro del Tabernáculo convocó a cantantes de diferentes partes del mundo para tener la experiencia de ser parte de este como un miembro internacional. En esta ocasión, entre los elegidos de diferentes países, ha sido seleccionada una peruana para cantar en las sesiones del sábado por la mañana, el domingo por la mañana y por la tarde, de la conferencia general del sábado 5 y domingo 6 de octubre.
Axa Denisse Zarate Maquera de 25 años de edad es de la ciudad de Tacna, Perú. Asiste al centro de reuniones del Barrio Belén de la unidad denominada estaca Tacna Arias Araguez de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
Recuerda su servicio como maestra de Seminarios como una gran experiencia de la cual está muy agradecida. Siente que la música es una forma especial de expresar sus sentimientos y recuerda que su mamá le enseñó a cantar como una manera genuina de comunicarse con el Padre Celestial y honrarlo.
Axa es soprano y desde niña a aprendido a tocar varios instrumentos musicales como el violín, la flauta, la guitarra y el piano. Expresa que la música siempre ha sido parte de ella, heredada de su padre y otros músicos de la familia.
Recuerda que participó en su primer concurso cuando tenía 4 años de edad. Desde allí se ha preparado y participado en diferentes concursos de canto. Recuerda especialmente el recibir dos premios a nivel nacional en los Juegos Florales Escolares Nacionales de los años 2012 y 2014 efectuado en Lima, la ciudad capital del Perú. Luego ha tenido presentaciones a nivel nacional y una a nivel internacional realizada en Colombia.
En el año 2016 recibió un reconocimiento municipal como “Nuevo valor artístico” de Tacna su ciudad natal. En el 2019 comenzó a estudiar canto académico y lenguaje musical. Ha participado de diferentes coros desde los 8 años de edad.
Axa Denisse atribuye gran parte de su formación a la cantante Charito Mistral, quien le enseñó desde que tenía 11 años de edad, a quien agradece al igual que sus docentes del Conservatorio Nacional de Música y por supuesto a su familia.
Manifiesta que recibió la invitación a participar en el Coro del Tabernáculo como una bendición para ella y su familia y dijo sentirse feliz de servir como misionera musical como integrante del Coro.
Y expresó su profunda gratitud por la oportunidad de participar en un programa inspirado por Dios, manifestando que “Cuando estamos dispuestos a ser instrumentos en las manos de Dios, suceden cosas maravillosas que jamás habíamos imaginado”