Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se reúnen para ayudar a sus vecinos a limpiar y proporcionar suministros de ayuda de emergencia tras la media docena de tornados que azotaron el norte de Tennessee el sábado 9 de diciembre de 2023, donde murieron seis personas.
Alrededor de 300 voluntarios están trabajando con United Way para ayudar con las labores de limpieza a partir del jueves 14 de diciembre.
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La Iglesia de Jesucristo también está enviando generadores, bidones de gasolina y cables de extensión a las zonas afectadas. Estos suministros ayudarán a restaurar la energía eléctrica en muchos hogares, proporcionando calefacción durante las actuales temperaturas invernales.
Stratie Young, un líder regional de la Iglesia en Hopkinsville, Kentucky, está agradecido por los esfuerzos que ya se están realizando. “Me considero bendecido por formar parte de una comunidad que se ama y se apoya mutuamente en momentos de conmoción y aflicción. Es una aplicación en tiempo real de estar dispuestos a seguir a Jesucristo, y llevar la carga los unos de los otros para que sean ligeras, llorar con los que lloran y consolar a los que necesitan de consuelo”.
La Iglesia también trabajará con Catholic Charities USA y la Cruz Roja Americana para intensificar la ayuda ante desastres, el cuidado de la salud mental y espiritual, y la ayuda alimentaria de emergencia.
El Servicio Meteorológico Nacional de Nashville, Tennessee, informa que el tornado de Clarksville estuvo en tierra durante una hora con vientos con velocidades máximas de 241 km/h, y recorrió sesenta y nueve kilómetros a través de tres condados y dos estados (Tennessee y Kentucky). Más de sesenta personas resultaron heridas.
La gerencia local de emergencias de Clarksville informó de más de 325 casas con daños moderados y casi 300 casas adicionales con daños graves que las hacían inhabitables.
Se ha informado que los misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días están a salvo. Los miembros cuyos hogares se han visto afectados se están quedando con amigos y otros miembros o en hoteles.