El pasado 10 de diciembre, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), presentó la edición 36 del aclamado ballet El Cascanueces, con la Compañía Nacional de Danza, en la estaca Churubusco de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El ballet, que ha sido merecedor de la presea Lunas del Auditorio, se presentó con ochenta bailarines en escena, entre los cuales se encuentran niños y jóvenes de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea del INBA, dirigida por Srba Dinic.
A la presentación acudieron más de 1000 personas entre miembros y no miembros de la Iglesia, la entrada fue gratuita. Jonatán Alcalá Primer consejero de la Estaca Churubusco comentó para Sala de Prensa Mormona “Nos sentimos muy bendecidos de poder realizar el evento, este es un esfuerzo y un trabajo de muchos hermanos y esperamos conseguir el objetivo, entre ellos el misional ya que buscamos que cada hermano pueda traer a algún amigo que quiera conocer del evangelio”.
Este es el segundo año que la estaca Churubusco realiza un evento junto con la Academia de Danza del INBA, el año pasado asistieron más de 700 personas pero tan sólo se presentó la mitad de la obra el Cascanueces, este año fue la obra completa además se contó con un escenario más amplio e iluminación.
- cascanueces 16
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Agustín Badillo no es miembro de la Iglesia, un amigo y compañero de trabajo lo invito a ver el Ballet en la Estaca; el año pasado el mismo amigo lo invitó a la casa abierta del Templo de la Ciudad de México; “Esa experiencia en la casa abierta, me pareció muy diferente, muy bien organizada, con mucho orden y el sentimiento que pude experimentar en esa actividad fue muy agradable, por lo que ese mismo sentimiento fue el que me motivo a venir”, comentó y además dijo “Nosotros pertenecemos a la iglesia católica, pero eso no nos impide aprender más y conocer más, por lo que acabo de hablar con los misioneros para que puedan visitarme en un fin de semana, ya que entre semana se me complica, pero los espero con mucho gusto”.
Por otra parte Sofia Astrid miembro de la Iglesia comentó “Me gusta muchísimo la puesta en escena, es un escenario bien profesional, la música suena padrísimo, los bailarines bailan increíble y es bien padre poder estar aquí. Creo que estas actividades nos ayudan a los miembros a saber que la iglesia o el evangelio de Jesucristo no solamente son como mandamientos o reglas, si no que el evangelio de Jesucristo puede traernos felicidad en muchas cosas, hasta en eventos culturales que pueden ser sanos para nosotros”.