El 21 de septiembre se ha designado como el Día Internacional de la Paz. En ese día, las Naciones Unidas pide un alto de fuego global por 24 horas como un recordatorio de que la guerra y el conflicto tienen que cesar. La paz impulsaría los esfuerzos que se hacen en otras áreas tales como la reducción de la pobreza, la educación, la igualdad de derechos y los problemas de salud; todo ello ayudaría a construir una sociedad más unida.
La Asamblea General ha declarado esta fecha día consagrado al fortalecimiento de los ideales de paz, tanto entre todas las naciones y todos los pueblos como entre los miembros de cada uno de ellos (fuente: http://www.un.org/es/events/peaceday/).
El tema elegido para el Día en 2016 es: “Los Objetivos de Desarrollo Sostenible: elementos constitutivos de la paz”.
El mensaje del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon es que “tenemos que proteger nuestro planeta, y sólo trabajando juntos podemos hacer que nuestros hogares futuros sean seguros y fuertes. El desarrollo sostenible es esencial para una paz duradera, y ambos dependen del respeto de los derechos humanos”.
Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible se adoptaron por unanimidad por los 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas en una cumbre histórica de los líderes mundiales en Nueva York en septiembre de 2015. Ellos son:
- Fin de la pobreza
- Hambre cero
- Salud y bienestar
- Educación de calidad
- Igualdad de género
- Agua limpia y saneamiento
- Energía asequible y no contaminante
- Trabajo decente y crecimiento económico
- Industria, innovación e infraestructura
- Reducción de las desigualdades
- Ciudades y comunidades sostenibles
- Producción y consumo responsables
- Acción por el clima
- Vida submarina
- Vida de ecosistemas terrestres
- Paz, justicia e instituciones sólidas
- Alianza para lograr los objetivos
El élder Dallin H. Oaks, del Cuórum de los Doce Apóstoles de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, declaró que la fórmula para obtener la paz es “obedecer los mandamientos de Dios. Las guerras y los conflictos son resultado de la iniquidad; la paz es el producto de la bondad… Cada persona favorece la causa de la paz mundial cuando guarda los mandamientos de Dios y vive en paz con sus familiares y vecinos”.
El élder John A. Widtsoe dijo: “Cada persona, de acuerdo con la doctrina de Cristo y su Iglesia, es responsable de la paz del mundo. Eso me hace tanto a mí como a todos ustedes individualmente responsables de la paz mundial, responsabilidad que no puede delegarse a otra persona ni ser arrojada sobre los hombros del gobierno ni de ninguna otra organización que tenga autoridad”.