Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
Para los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, el servicio a los demás es una característica importante de un discípulo, o una discípula, de Jesucristo. Además creen que un discípulo está dispuesto a llevar las cargas de otras personas y a consolar a los que necesiten consuelo.
Tal persona es Victoria Petrie de Aldea Villa Graciela, Cuilapa, Santa Rosa. La hermana Petrie, como es conocida por muchos, ha pasado toda su vida sirviendo a los demás. Ella cree que el servicio a los demás es una responsabilidad suya. El servicio que ella presta no lo presta porque se sienta obligada, sino que lo hace porque realmente ama a su prójimo.
“Para mí es muy importante el servicio”, dice la hermana Petrie. “Es una parte de mi vida el servir a los demás. Ha sido algo muy bonito en mi vida. Me ha edificado mucho como una persona. Agradezco a mi Padre Celestial porque me ha puesto en el camino todo esto. Le agradezco por poder ayudar a la gente, no solamente materialmente, sino también espiritualmente. Es una gran bendición para mí”.
La hermana Petrie ha sido la fuerza impulsora de proyectos que han bendecido la vida de personas en necesidad, incluyendo la entrega de kits para los recién nacidos y útiles escolares para alumnos de escuelas en áreas de bajos recursos. Por más de ocho años también ha trabajado como voluntaria en el hospital regional de Cuilapa y el Centro de Salud de esa misma ciudad. Por medio de su servicio altruista, ella ayuda a los médicos y a las enfermeras con lo que sea necesario hacer para dar comodidad y cuidado a los pacientes.
“La hermana Vicky es muy generosa. Es una persona que le inspira a uno. Para mí ha sido un ejemplo y he aprendido mucho de ella; sobre todo el amor al prójimo”, dice Estelita Escalante, supervisora de educación de Santa Cruz Naranjo, Barberena, Santa Rosa.
En la conferencia general de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en octubre de 2009, el presidente Thomas S. Monson declaró: “Siempre habrá personas con necesidades, y cada uno de nosotros puede hacer algo para ayudar a alguien”.
Aún en su edad avanzada y con desafíos físicos, la hermana Petrie siempre está poniendo las necesidades de otros delante de las suyas porque como dice ella, “Eso es lo que haría Jesús”.
Es cierto que H. Jackson Brown Jr., autor de “Pequeño libro de instrucciones para la vida” nunca conoció a Victoria Petrie, pero sus palabras en ese libro la describen muy bien. Él dice: “Recuerda que las personas más felices no son las que reciben más, sino las que dan más”.
El élder M. Russell Ballard, del Cuórum de los Doce Apóstoles, el segundo cuerpo presidente en el gobierno de la Iglesia, dijo que “Sólo cuando amemos a Dios y a Cristo con todo nuestro corazón, nuestra alma y nuestra mente, seremos capaces de compartir ese amor con nuestro prójimo mediante actos de bondad y de servicio, de la manera en que el Salvador nos amaría y serviría a todos si estuviera hoy entre nosotros” (Liahona, mayo de 2011). Se puede decir de la hermana Petrie que es verdaderamente una discípula de Jesucristo.