La Iglesia de Jesucristo Dona Equipo Médico para Fortalecer la Salud Visual en Paraguay 

En un esfuerzo por apoyar la salud visual de las personas en situación de vulnerabilidad, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha donado equipos médicos avanzados a la Fundación Banco de Ojos "Fernando Oca del Valle" y a la Fundación Visión. Este donativo incluye un phacoemulsificador con vitrector, un sistema TOPCON OFFISS y un microscopio especializado, instrumentos que serán utilizados para realizar cirugías de vitrectomía posterior y tratamientos de cataratas. Esta tecnología permitirá atender a más de 20,000 personas al año, muchas de las cuales padecen enfermedades como la retinopatía diabética y la trombosis venosa retiniana. 

La Fundación Banco de Ojos "Fernando Oca del Valle" ha brindado atención médica durante 50 años, ofreciendo más de 15,000 exámenes visuales y alrededor de 800 cirugías anuales a personas de bajos recursos. Laura Acosta, administradora de la fundación, agradeció el aporte de La Iglesia, mencionando la importancia de este equipo para mejorar la calidad de vida de los pacientes. 

El impacto en los pacientes ha sido significativo. Don Vidal, un residente de Lambaré que recibió un trasplante ocular gracias a este equipo, compartió emocionado su experiencia: “Antes veía una nube, y acá cuando me hizo la cirugía, el trasplante, al otro día me saca el parche la doctora y ya estuve contento cuando puedo ver”. Este testimonio refleja la diferencia que la donación está logrando en la vida de las personas atendidas. 

La donación también incluyó un equipo de láser portátil que permite a la Fundación Visión tratar a bebés prematuros y adultos en riesgo de desprendimiento de retina. Este equipo ya ha sido utilizado para evaluar a más de 200 bebés en los últimos tres meses, en clínicas de diversas zonas de Paraguay. El sistema es portátil y puede ser trasladado a centros médicos fuera de Asunción, lo que asegura que los pacientes de áreas remotas puedan recibir atención a tiempo y cerca de sus hogares. 

Este donativo subraya el compromiso de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días con la salud y el bienestar de las comunidades, colaborando con organizaciones que trabajan en favor de los más necesitados.