Inicia la construcción del cuarto Templo en Perú

Dio inicio la construcción del Templo de Los Olivos en Lima, Perú, el cuarto recinto de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el país.

El Élder Enrique R. Falabella, del Quórum de los Setenta y presidente del área del noroeste de América del Sur, encabezó este sábado 8 de junio la colocación de la primera piedra y quien dijo a los Santos de los Últimos Días que la construcción de un nuevo templo es algo que nunca olvidarán.

“Hay algo especial en los templos. A medida que pasemos más tiempo en la casa del Señor, nuestra vida tendrá un mayor significado", expreso.

Junto con el Élder Falabella estuvieron sus consejeros en la presidencia del área, el Élder Hugo Montoya, primer consejero, y el Élder Mathias Held, segundo consejero.

“Los templos siempre han sido un faro de luz”, dijo el Élder Held. "(Ha sido) una fuente de fortaleza para nuestro pueblo y hoy no es diferente. Este será un hermoso edificio donde se sentirá con fuerza el espíritu del Señor".

La membresía de la iglesia en Perú es de más de 605 mil hermanos y hermanas. Al nuevo Templo de Los Olivos acudirán también miembros de Bolivia, Colombia, Ecuador y Venezuela.

La Iglesia tiene otros dos templos en el país sudamericano: el Templo de Lima Perú que se dedicó el 10 de enero de 1986, y el Templo de Trujillo, dedicado el 21 de junio de 2015. En noviembre y diciembre próximo será la dedicación e inauguración, respectivamente, del tercer templo el de Arequipa Perú.

La colocación de la primera piedra y los mensajes que los líderes de la Iglesia dieron fueron transmitidos en vivo a todas las capillas de Perú.

Los templos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días difieren de los centros de reuniones o capillas donde los miembros se reúnen para los servicios de adoración del domingo. Los templos se consideran casas del Señor donde las enseñanzas de Jesucristo se reafirman a través del bautismo y otras ordenanzas que unen a las familias por la eternidad. En el templo, los miembros de la Iglesia aprenden más sobre el propósito de la vida y hacen convenios para seguir a Jesucristo y servir a sus semejantes.