Un grupo de más de 60 jóvenes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, de Asunción Norte, participaron en una significativa jornada de servicio voluntario en las instalaciones de la Fundación Pequeño Cottolengo Don Orione, centro que brinda atención integral a personas con discapacidad intelectual y física.
- Pequeno-Cottolengo-en-jornada-de-servicio-solidario-
- Pequeno-Cottolengo-en-jornada-de-servicio-solidario-2
- Pequeno-Cottolengo-en-jornada-de-servicio-solidario-3
- Pequeno-Cottolengo-en-jornada-de-servicio-solidario--5
| Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
Acompañados por sus líderes religiosos, los jóvenes colaboraron con tareas de jardinería, limpieza, pintura y embellecimiento de espacios, además de compartir momentos de recreación y alegría junto a los residentes del lugar. La actividad fue enriquecedora tanto para los pacientes como para los voluntarios, quienes vivieron una experiencia de empatía, humildad y conexión espiritual.
El Obispo Juan Escobar, uno de los líderes presentes durante la jornada, expresó:
“Nos sentimos conmovidos por el entusiasmo y el amor con el que los jóvenes ministraron a estos hijos especiales del Padre Celestial. Siguiendo el ejemplo de Jesucristo, sirvieron con gozo, y a cambio recibieron gratitud, sonrisas y una profunda lección de amor al prójimo”.
Donaciones para fortalecer la obra solidaria del centro
Además del voluntariado, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días realizó una donación de equipamiento en diciembre de 2024 para la cocina del Pequeño Cottolengo, que incluyó carros para transporte y conservación de alimentos, destinados a mejorar la atención de los pacientes internos del centro asistencial.
La entrega de los insumos se realizó con la participación de misioneros de servicio y líderes locales de la Iglesia, quienes compartieron un encuentro fraterno con el Padre Claudio Muñoz, director del centro, para formalizar el acto solidario.
El Padre Muñoz agradeció profundamente el gesto, destacando que:
“Nuestra obra se sostiene con la ayuda de personas de buen corazón. Estas donaciones marcan una gran diferencia para los 120 pacientes que viven aquí, muchos de los cuales fueron rescatados del abandono. Nos alegra profundamente ver a jóvenes comprometidos con servir y acompañar”.
Una colaboración que une creencias y corazones
La Fundación Pequeño Cottolengo Don Orione, dirigida por la Iglesia Católica, se encuentra en la zona periférica de la capital y cumple una labor esencial de acogida, atención médica y contención espiritual para personas con discapacidad.
Para los Santos de los Últimos Días, la posibilidad de colaborar con hermanos de otras confesiones religiosas en obras de amor y servicio refleja uno de los principios fundamentales del Evangelio: brindar ayuda a quien lo necesite, sin distinciones.