La Iglesia de Jesucristo y CILSA: 18 años transformando vidas a través de la inclusión 

En un acto solidario realizado en la capilla de La Boca, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días entregó 42 sillas de ruedas y diversos elementos ortopédicos a CILSA, una organización comprometida con la inclusión de personas con discapacidad. Este evento se enmarca en una colaboración de más de 18 años, durante la cual se han donado más de 18,000 sillas de ruedas en distintas localidades del país.

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El impacto de estas donaciones es tangible. No se trata únicamente de facilitar la movilidad de quienes las reciben, sino también de abrir oportunidades para que las personas beneficiadas puedan estudiar, trabajar y llevar adelante sus actividades cotidianas con mayor autonomía. Estas contribuciones han sido un pilar fundamental para CILSA, permitiéndole redirigir recursos hacia otras iniciativas esenciales que refuercen su misión de inclusión plena de personas con discapacidad y en situación de vulnerabilidad social.

Impacto a lo largo del tiempo

Laura Wierszylo, directora de gestión, innovación y desarrollo estratégico y la presidenta de CILSA, Silvia Mauricia Carranza destacaron el profundo impacto de estas donaciones, resaltando que no se trata solo de entregar sillas de ruedas, sino de brindar a las personas la oportunidad de alcanzar la autosuficiencia.

Además de las sillas de ruedas, esta colaboración incluye la participación de voluntarios de la Iglesia de Jesucristo en diversas actividades organizadas por CILSA, como la pintura de escuelas y otras acciones comunitarias. Este trabajo conjunto ha fortalecido una relación basada en el compromiso mutuo de mejorar la calidad de vida de las personas.

CILSA, gracias a estas donaciones, ha logrado redirigir fondos hacia otros recursos esenciales para el desarrollo integral de las personas con capacidades diferentes, consolidando su misión de inclusión y apoyo. Se destaca el impacto secundario ya que Cilsa trabaja por la inclusión plena de personas con discapacidad y en situación de vulnerabilidad social

Durante la jornada de entrega, los asistentes fueron testigos de emotivos momentos al conocer las historias de aquellos que han visto un cambio significativo en sus vidas gracias a estas donaciones. Esta labor no solo transforma vidas, sino que también inspira a seguir construyendo un mundo más inclusivo.

La donación de este año representa una continuidad en el esfuerzo por promover la dignidad y la autosuficiencia de las personas con discapacidad. Las sillas de ruedas y los elementos ortopédicos entregados se convierten en herramientas de esperanza para quienes enfrentan desafíos diarios, demostrando que el servicio y la solidaridad son esenciales para construir una sociedad más equitativa.

En el acto estuvieron presentes autoridades del comité ejecutivo de CILSA, los matrimonios misioneros de ayuda humanitaria, Taylor y de Comunicación Edwards, Walter Ricart de oficinas del área y la directora de Comunicación Multiestac, Andrea Bevans de la Iglesia de Jesucristo, quien agradeció la oportunidad de servir destacado que es la obra del Salvador Jesucristo.

Al finalizar el evento, tanto los representantes de CILSA como los de la Iglesia reafirmaron su compromiso de seguir trabajando juntos en iniciativas que marquen la diferencia. Este acto solidario no solo celebró años de colaboración, sino que también renovó el propósito de aliviar cargas y ofrecer nuevas oportunidades a quienes más lo necesitan.