Libertad religiosa une a líderes de fe en Bogotá en favor de la paz

El 5 de diciembre de 2025, representantes de diversas religiones y expresiones de fe participaron en una cena especial en Bogotá, convocada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, con el propósito de conmemorar el 77.º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Durante el encuentro, los asistentes reafirmaron su compromiso con la defensa de la libertad religiosa y el trabajo conjunto por una sociedad más justa y respetuosa.

Sheik Ahmad Tayel, representante de la Comunidad Islámica en Colombia, subrayó que la esencia de la fe trasciende los números y los espacios físicos. Por su parte, Marcos Peckel, director de la Comunidad Judía de Colombia, destacó que este derecho fundamental requiere una defensa constante y una visión cada vez más incluyente para fortalecer la convivencia democrática.

Durante la reunión, Luis Prieto, director de Comunicación para Colombia de La Iglesia de Jesucristo y abogado de profesión, leyó el artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, recordando que toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión. Asimismo, señaló que el artículo 19 de la Constitución Política de Colombia de 1991 y la Ley 133 de 1994 garantizan este derecho como una riqueza para la diversidad cultural del país.

Héctor Pardo, presidente de la Confederación Colombiana de Libertad Religiosa, Conciencia y Culto (CONFELIREC), explicó que estos avances fueron posibles gracias a un proceso histórico que permitió a Colombia pasar de la tolerancia religiosa al reconocimiento pleno de la libertad de culto como derecho fundamental. Destacó que este cambio, impulsado desde la Asamblea Constituyente, consolidó al país como un Estado Social de Derecho que reconoce oficialmente la pluralidad religiosa, afirmación que fue recibida con aprobación y aplausos por los asistentes.

Durante el encuentro, los representantes compartieron un espacio de diálogo, celebración y agradecimiento mutuo por la causa común que une a las diversas confesiones religiosas en Colombia. Raúl Rubio, representante de la Comunidad Mesiánica Yovel, destacó que el país es multicultural y multirreligioso, y que el respeto comienza con el conocimiento mutuo. Señaló que este tipo de espacios fortalecen la convivencia y evitan retrocesos en los avances democráticos alcanzados en materia de libertad religiosa.

Alejandro Fayad Betancourt, presidente de la Iglesia de Unificación en Colombia, señaló que existen más elementos en común que diferencias entre las comunidades religiosas. Destacó la importancia de centrarse en esos valores compartidos para afrontar los desafíos sociales que enfrentan las distintas comunidades. Asimismo, resaltó que estos espacios de encuentro permiten derribar barreras, fomentar el respeto mutuo y fortalecer la convivencia interreligiosa en el país.

Tras el encuentro, los asistentes se retiraron con lazos de hermandad fortalecidos y un ánimo renovado por la convicción compartida. En entrevista, Héctor Pardo expresó:

“Todos buscamos la paz, la unidad y el amor”. Asimismo, agradeció a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por promover estos espacios de diálogo interreligioso. Finalmente, hizo un llamado a orar y a vivir el mandamiento de amarnos unos a otros, siguiendo el ejemplo de Cristo.