En un día lleno de esperanza y solidaridad, Andrea Spannaus, segunda consejera de la Presidencia General de las Mujeres Jóvenes, y Amy Wright, primera consejera de la Presidencia General de la Primaria de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, visitaron el Centro de Rehabilitación de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem) en Santiago, Chile. En el lugar fueron recibidas por el Dr. Jorge Rojas Zegers, director médico de Coaniquem, y Jorge Rojas Goldsack, presidente de la fundación. Asimismo, participaron de la visita el élder Joaquin E. Costa, presidente del Área Sudamérica Sur y su esposa Renée.
Durante la reunión inicial, el Dr. Jorge Rojas Zegers explicó el modelo de atención innovador de Coaniquem, que busca que los niños vean su proceso de recuperación como una “aventura”. Este enfoque se simboliza en el Árbol de la Vida, el cual representa la fortaleza y el crecimiento que experimentan los niños a lo largo de su rehabilitación. En esta aventura, los niños no están solos, ya que son acompañados por amigos muy especiales, representados por animales que simbolizan diferentes características valiosas. Estos animales ofrecen a los pacientes ejemplos de valentía, perseverancia, resiliencia y compañerismo, ayudándolos a enfrentar los desafíos físicos y emocionales de su recuperación.
Adicionalmente discutieron los avances y desafíos de Coaniquem, destacando las importantes donaciones que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha realizado a la institución a lo largo de los años. Entre las contribuciones más notables están la donación de una central de esterilización y el equipamiento para el pabellón quirúrgico, elementos clave para mejorar la calidad del tratamiento médico ofrecido a los pacientes.
Spannaus y Wright se mostraron profundamente conmovidas por esta visión única, que no solo aborda la sanación física de los niños, sino también su bienestar emocional, integrando el aspecto lúdico y el trabajo en equipo para hacer más llevadero el proceso de rehabilitación.
Tras la reunión, las hermanas realizaron un recorrido por las instalaciones del centro, conociendo de primera mano los servicios de rehabilitación física y psicológica que se brindan de manera gratuita a los niños y adolescentes. Ambas expresaron su profunda admiración por el trabajo y dedicación del personal de Coaniquem, que ayuda a los menores a superar los efectos físicos y emocionales de las quemaduras.
La jornada concluyó con un encuentro privado entre las visitantes y algunos pacientes del centro, donde Spannaus y Wright compartieron mensajes de esperanza y fortaleza. Este momento destacó la importancia de la resiliencia en los niños y sus familias, y la capacidad del amor y el apoyo para marcar la diferencia en sus procesos de recuperación.
La visita subraya el continuo compromiso de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días con el bienestar de la comunidad, tanto a través de donaciones como del apoyo directo a instituciones como Coaniquem, que desde su fundación ha impactado positivamente a miles de familias.
Sobre Coaniquem
Coaniquem es una organización sin fines de lucro fundada en 1979, dedicada a ofrecer atención gratuita a niños y adolescentes que han sufrido quemaduras. Con más de 40 años de experiencia, Coaniquem es un referente en América Latina en el tratamiento y rehabilitación de menores con quemaduras graves.