Líderes Mundiales visitan Nicaragua

Recientemente líderes generales de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días visitaron Centroamérica para apoyar, enseñar y capacitar a líderes locales y aconsejar a mujeres jóvenes y adultas miembros de la Iglesia.  Bonnie L. Oscarson, presidenta general de las Mujeres Jóvenes y Carole K. Stephens, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro vinieron para capacitar y apoyar a las mujeres en este área.

Carole Stephens se reunió con líderes y miembros de la Sociedad de Socorro, organización de la Iglesia para mujeres adultas. Ella ayudó a los líderes a comprender mejor su deber de cuidar y vigilar a las mujeres bajo su dirección. El propósito de la organización es “preparar a las mujeres para las bendiciones de la vida eterna al ayudarlas a aumentar su fe y su rectitud personal, a fortalecer a las familias y los hogares, y ayudar a los necesitados. La Sociedad de Socorro logra estos propósitos por medio de la instrucción dominical del Evangelio, de otras reuniones de la Sociedad de Socorro, del programa de maestras visitantes, del servicio caritativo y de Bienestar”. Explicó que debemos hacer de nuestros hogares “lugares de seguridad” contra las dificultades del mundo.

En otro sitio Bonnie Oscarson visitó a las mujeres jóvenes entre las edades de 12 a 17 años.  Oscarson habló de los muchos sitios web que la Iglesia tiene disponibles y los recursos para la juventud.

Animó a las jóvenes a vivir de acuerdo con el Evangelio de Jesucristo y a utilizar las ayudas que ofrece el programa de las Mujeres Jóvenes. Mencionó que Dios nos conoce y sabe del potencial de cada uno y está dispuesto a asistirnos si solo tomamos buenas decisiones y tratamos de seguir Su consejo.

Ambas centraron sus enseñanzas en cuatro puntos importantes:

1. La preparación espiritual: esto implica todo un proceso de conversión; es vivir de acuerdo a las enseñanzas de Jesucristo, también hablo de la importancia de la oración, el ayuno y el leer las escrituras diariamente, todo esto nos ayuda a prepararnos espiritualmente para acercarnos más al Señor .
2. Participar en consejos.
3. Ministrar a otros: debemos fortalecer el testimonio de los demás por medio del servicio desinteresado y el amor sincero.
4. Enseñar el Evangelio de Jesucristo: nuestra enseñanza se centran en Cristo, nuestra meta es vivir de acuerdo con su ley.

Dirigiéndose a la juventud la Primera Presidencia de la Iglesia se expresó así: “Nuestros estimados hombres y mujeres jóvenes, tenemos gran confianza en ustedes.

Ustedes son amados hijos e hijas de Dios y Él los tiene presentes; han venido a la tierra en una época de grandes oportunidades y también de grandes desafíos. Las normas de este folleto les ayudarán con las decisiones importantes que están tomando ahora y las que tomarán en el futuro. Les prometemos que, si guardan los convenios que han hecho y estas normas, serán bendecidos con la compañía del Espíritu Santo, su fe y testimonio serán más firmes y disfrutarán de mayor felicidad”.  (Folleto ´Para la Fortaleza de la Juventud´)