El 2 de abril se llevó a cabo en Bucaramanga el encuentro protocolar para la entrega formal de la donación de USD 1 080 000 que realizó La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días a la organización sin ánimo de lucro ADRA, con el fin de brindar acceso a comidas calientes y servicios de atención primaria en salud a la población migrante.
Se trata 35,700 beneficiarios que recibirán atención a través de consultas médicas generales, exámenes de laboratorio y medicamentos básicos, así como alimentos para migrantes en tránsito a lo largo de los corredores migratorios del Departamento de Santander. Adicionalmente, el proyecto incluye promoción de salud a través de radio, con mensajes sobre estilos de vida saludables, lactancia materna exclusiva y prevención de las principales enfermedades identificadas como de riesgo en la población del sector.
El presidente Oscar Contreras, representante de la Iglesia de Jesucristo, dijo: "La Iglesia realiza este tipo de donaciones porque[…] quiere seguir las enseñanzas de Jesucristo; desarrollar amor y compasión por todos nuestros semejantes. Esa es la razón primordial, el amor a nuestro prójimo, sin importar credo, procedencia ni política".
Acerca de la identificación de la población beneficiaria, Jair Flórez, director nacional de ADRA, Colombia dijo: "Se identificaron unos lugares foco en el territorio de Santander. Este fue un trabajo que realizó nuestro equipo […] que hace una matriz de necesidades una matriz de necesidades y cruzan la información con la información que tiene el Estado. Después de esto, arrojan unos datos estadísticos e identificamos a través de un filtro cuáles son las personas que realmente necesitan el apoyo de los servicios de salud".
Venezuela tiene el mayor éxodo de la historia reciente en la región, con Colombia como el principal receptor de migrantes de este país, y Bucaramanga es una de las ciudades que más de ellos recibe. La mayoría de los migrantes en condiciones de necesidad no tiene acceso a programas estatales que les permitan recibir servicios básicos, por lo que este proyecto busca apoyarlos en sus mayores necesidades; alimentos, agua potable, medicamentos, atención médica y orientación.
ADRA es el brazo humanitario de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Está considerada por los organismos internacionales como una red de agencias de ayuda humanitaria y de desarrollo que en la actualidad tiene presencia en más de ciento treinta países. En Colombia ha estado presente desde 2018, con intervenciones y respuesta humanitaria en el sector salud a través de su red de proveedores de servicios con clínicas fijas y unidades móviles.
La Iglesia de Jesucristo tiene proyectos humanitarios en 190 países y territorios. En Colombia, los programas están dirigidos principalmente a ayudar a población vulnerable en el corto y mediano plazo. Sus esfuerzos de ayuda social responden directamente a su doctrina centrada en las enseñanzas de Jesucristo y servicio al prójimo.