Se ha dicho que si no planificamos, planeamos fracasar.
Todos queremos estar preparados para futuras tormentas y dificultades en la vida, pero no siempre podemos predecir lo que viene y lo que tenemos que hacer para prepararnos. A veces puede parecer como si estuviéramos jugando al ajedrez, haciendo todo lo posible para pensar dos o tres movimientos por delante.
Para prepararse para desastres financieros o naturales, todos sabemos que es aconsejable almacenar alimentos, agua, medicamentos, etc. Pero, ¿qué pasa con los desafíos espirituales que podríamos enfrentar? ¿Qué podemos hacer hoy para que podamos encontrar paz y satisfacción mañana, pase lo que pase?
En un discurso de graduación de la universidad, el presidente Russell M. Nelson dijo a los graduados que habían trabajado arduamente planeando qué hacer en su futuro: "En lugar de concentrarse en lo que deben hacer, ahora es el momento de concentrarse en quiénes deben ser" (véase "Discípulos de Jesucristo — Defensores del matrimonio". Graduación de la Universidad Brigham Young, 14 de agosto de 2014, speeches.byu.edu).
| Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
Siempre es bueno tener una lista de tareas pendientes. Pero cuando se trata de preparación espiritual, una lista de futuros puede ser aún más importante. ¿Qué tipo de persona quieres ser? ¿Cuáles son los rasgos de carácter que traerán la mayor medida de alegría a usted y a sus seres queridos, independientemente de los desafíos que pueda enfrentar?
Un joven padre recientemente reflexionó sobre este tipo de preguntas. A menudo iba de golf con amigos, pero estaba empezando a ver que estaba obstaculizando su crecimiento personal y su tiempo en familia. Decidió que era hora de trabajar para convertirse en el esposo y padre que quería que su familia tuviera, por lo que reorganizó sus prioridades y comenzó a establecer metas para el futuro.
Una mujer con una carrera prestigiosa tomó una decisión similar que definió su vida. Ella eligió usar su riqueza para construir orfanatos en todo el mundo en lugar de gastarla en una vida lujosa. Ella decidió que a largo plazo, esto es lo que quería dar al mundo.
Cuando meditamos y oramos acerca de nuestro camino y escuchamos la guía del Señor, a menudo nos sentimos inspirados a pivotar, priorizar y prepararnos para un futuro que podría ser diferente de lo que esperábamos. Estos momentos pueden sorprendernos, y pueden ser difíciles. Pero si confiamos en el Señor, que ve lo que nosotros no podemos, Él nos ayudará a tener éxito en nuestros planes y a planear tener éxito.
Fuente: Música y Palabras de Inspiración (Music and the Spoken Word)