Pequeños gestos de bondad

Se ha dicho que de las pequeñas cosas nacen las grandes. Esto se aplica a muchos aspectos de la vida, pero especialmente a las pequeñas cortesías, los pequeños actos de bondad que terminan marcando una gran diferencia. Verdaderamente, de lo pequeño y simple surge lo que es grande. Sucede cuando una plántula se nutre y se convierte en un árbol fuerte, y sucede cuando pequeñas bondades ayudan a las personas a florecer y crecer. Es una de las formas más importantes en que podemos marcar la diferencia en el mundo.

Y ciertamente, hay cosas en el mundo que desearíamos que fueran diferentes. Vemos conflictos e incluso guerras, y nos preguntamos cómo mejorarán las cosas. En este sentido, nuestro día no es único: aquellos que nos precedieron se enfrentaron a tiempos desafiantes y difíciles también. Pero eso no significa que la situación sea desesperada. Hay algo que podemos hacer para sentirnos un poco mejor acerca del mundo y de la vida. Y no tiene que ser algo grandioso o dramático. A veces, incluso los problemas más complicados tienen soluciones sorprendentemente simples.

Cuando el mundo parece salirse de control, podemos hacer nuestra parte para "tratar de detener la locura", como escribió un columnista. "Comienza simplemente con el cuidado", dijo, "levantando la vista de nuestros teléfonos celulares y haciendo contacto visual; preguntándole al vecino sobre su día; agradecer al proveedor de servicios; hacer favores sin una tarjeta de puntuación; y compartir lo que tenemos con los necesitados. A veces, un pequeño gesto de bondad puede cambiar el día o la vida de alguien". Ella continúa: "Si el efecto acumulativo de los actos malos nos deprime, ¿no podría el efecto acumulativo de las buenas obras elevarnos?" ("A veces, un pequeño gesto de bondad puede cambiar el día o la vida de alguien", por Kathleen Parker, Deseret News, 20 de junio de 2017).

Es simple, en realidad. Una manera segura de comenzar a sentirnos un poco mejor acerca del mundo y de nuestras vidas, una buena manera de realmente hacer una diferencia en un mundo problemático, es mirar a nuestro alrededor y hacer algo bueno. El bien que hacemos importa, porque la mejor manera de ahuyentar la oscuridad es encender una luz, aunque sea pequeña. Así que hagamos algo bueno hoy y mañana. Y, antes de que nos demos cuenta, el mundo se convertirá en un lugar mejor.