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Presidente de Área México visita a damnificados en Juchitán

“El temblor es una oportunidad para reconstruir la ciudad, pero también de reconstruir nuestra alma” Paul B. Pieper

El pasado jueves 7 de septiembre un terremoto de 8.2 grados en la escala de Richter sacudió el centro y sur del país, siendo Oaxaca el epicentro y Juchitán el municipio con mayor afectación; este jueves 14 de septiembre, el presidente de Área México estuvo de visita para mostrar su apoyo y solidaridad. 

Por la mañana, se reunió con la presidenta estatal del DIF, la señora Ivette Morán Rodríguez de Murat, en un centro de acopio, desde el que agradeció que la organización se sumara a la ayuda en un momento crítico para las familias al enviar una donación de Servicios Caritativos SUD AC de 10 mil despensas y 300 casa de campaña: “necesitamos manos, se necesita lo que cada uno pueda aportar para apoyar a los damnificados... hay que hacer mucho por Oaxaca, hay que trabajar de manera solidaria unidos con el corazón y agradecemos no estar solos”.

Más tarde, el élder Pieper se reunió con los líderes locales a quienes alentó y de quienes recibió un informe de la condición de los miembros de la iglesia. Hizo un recorrido por el centro del municipio para visitar a algunas familias santos de los últimos días afectadas por el terremoto a quienes mostró su amor y preocupación: “El temblor es una oportunidad para reconstruir la ciudad, pero también de reconstruir nuestra alma”, comentó.

 La familia Toledo dormía en su casa cuando fueron sorprendidos por el temblor “apenas alcanzamos a salir”, se espera que con las réplicas su domicilio se desplome, por lo que no es factible entrar a rescatar sus pertenencias, “perdimos todo… Gracias a Dios estamos vivos… los hermanos nos han apoyado con ropa y alimento” comenta el hermano Jorge Toledo. 

Luego, en el centro de reuniones de la congregación Cheguigo donde ha llegado apoyo y se está proveyendo de alimentos, medicamentos y ropa; agradeció el servicio que se ofrece para que funcione como albergue temporal. Aquí platicó con Luis Ramírez, quien relató su experiencia durante el temblor “no podían sacarme, mi silla de ruedas no estaba cerca… estamos vivos de milagro”.

Por la tarde, se reunió con miembros de los consejos de las congregaciones en las estacas México Juchitán y Juchitán las Flores: “Este es un evento que va a definir la vida individual y de la comunidad por muchos años… hermanos, vamos adelante”; habló de ver el futuro y reconocer este evento como una oportunidad “asegurémonos de que este desastre natural no sea un desastre espiritual, asegurémonos de que sea una bendición espiritual”.

Mormones y sociedad civil son beneficiarios de la donación que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días hace a través de Servicios Caritativos SUD AC., que brinda apoyo, principalmente mediante la donación de sillas de ruedas, creación de pozos de agua potable, reanimación neo natal, cirugía de córnea y ayuda en desastres naturales.

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