Tercera Edición del Color Fest se lleva a cabo en el Valle

Aunque en el Ecuador solo tenemos dos estaciones en el año, invierno y verano, este sábado se disfrutó de una mañana primaveral. Ropa, cabello y caritas empapadas de agua y pintura de muchos colores son la huella que deja el divertido y emocionante día que disfrutaron más de 200 jóvenes de la Estaca Los Chillos ubicada en uno de los valles de la capital.

Mateo Ramos de 16 años, participó del festival, y nos cuenta entre risas y mucha energía que “la pintura fosforescente, ¡lanzar agua y divertirte sin parar en medio de juegos y dinámicas de grupo… no tienen precio!

Los presidentes de Hombres y Mujeres Jóvenes, por tercer año consecutivo organizan esta fiesta del ¨Color¨ con el objetivo de reunir a chicos y chicas de 12 a 17 años para compartir en un ambiente de alegría, compañerismo, y sobre todo de muchos colores, porque el color es vida, es energía que la juventud quiere sentir y transmitir.

La celebración consiste en lanzarse polvos vegetales brillantes y agua como símbolo de felicidad de un carnaval que se puede prolongar al gozar de un privilegiado clima, por ser un país que se encuentra en la línea ecuatorial.

El hermano Esteban Calderón, primer consejero de la organización de Hombres Jóvenes de la Estaca anfitriona, mencionó, "algunas prácticas que serían impensables en otro contexto debido a la formalidad de las normas de la Iglesia son perfectamente aceptables durante la celebración de este festival".

Los líderes de La Iglesia brindan su tiempo y promueven el desarrollo de la juventud en todos los aspectos. Este tipo de actividades invita a los jóvenes a divertirse en un ambiente dinámico marcado por valores cristianos.

En definitiva, la pintura vegetal con un poco de agua y detergente restaurará las prendas manchadas, pero lo que no se podrá borrar de su corazón y mente son los gratos momentos vividos entre amigos.