La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días a través del Departamento de Ayuda Humanitaria entregó el miércoles 28 de julio, una importante donación a la Secretaria de Salud Tegucigalpa, Honduras, en apoyo a la campaña de vacunación contra el COVID-19.
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El viceministro del despacho de Salud, Doctor Nery Conrado Cerrato, junto a la directora del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) Doctora Ida Berenice Molina, recibieron equipo e insumos para la campaña de vacunación contra el virus del COVID-19, como bocinas amplificadoras, megáfonos, chalecos identificadores para vacunadores, carpas, banner promocional de vacunación, rótulos de puestos de vacunación, mascarillas, alcohol gel y material impreso de bifolios informativos de las vacunas contra el COVID-19.
Además, la Iglesia donó 1 millón 112 mil de jeringas especiales para aplicar las vacunas.
El costo total de esta donación es de 6,345,168.50 lempiras en equipos e insumos que serán distribuidos en todos los establecimientos de saluda nivel nacional.
“Estamos muy contentos por esta importante donación de la Iglesia para apoyar las campañas de vacunación y enfrentar la pandemia del COVID-19, tanto en la estrategia de comunicación como en la vacunación que se realiza en los puntos a nivel nacional y beneficiando a miles de hondureños”, expresó la ministra de Salud, Alba Consuelo Flores.
Por su parte el viceministro Doctor Cerrato agradeció el apoyo recibido y se refirió que la Iglesia por muchos años ha apoyado a este ministerio, facilitando así las labores de vacunación a nivel nacional y mostrando el amor cristiano que todos debemos tener.
El presidente José Luis Cárcamo, líder eclesiástico de la Iglesia de Jesucristo, dijo que para la Iglesia es una bendición apoyar en este proyecto y que una muestra de amor al prójimo tal como Jesucristo enseñó.
Esta donación se suma a la ayuda humanitaria a nivel mundial que la Iglesia realiza con el propósito de beneficiar a todos los hijos de Dios y de ministrar como Jesucristo lo haría “Y andad en amor, como también Cristo nos amó…”. (Efesios 5:2).