El día de Año Nuevo bien podría ser solo otro día, no diferente de los 364 que siguen, si no fuera por nuestras tradiciones. Nos reunimos con familiares y amigos. Comemos alimentos especiales juntos. Celebramos y reflexionamos.
Damos gracias a Dios por las bendiciones del año pasado y las oportunidades en el próximo año. No, no hay nada inherentemente especial en el 1 de enero. Pero de estas y muchas otras maneras, hacemos que el día de Año Nuevo sea significativo con nuestras tradiciones de reunión, de amor, de recordar, de gratitud a Dios, de mirar hacia atrás y mirar hacia adelante.
| Temple Square is always beautiful in the springtime. Gardeners work to prepare the ground for General Conference. © 2012 Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved. | 1 / 2 |
Se dice que San Benito, un santo patrón de Europa, expresó este pensamiento simple pero alentador: "Todos los días comenzamos de nuevo". Y si eso es cierto para un nuevo día, ciertamente es cierto para un nuevo año. Todos anhelamos la oportunidad de comenzar de nuevo, volver a empezar. Es un sentimiento que suena verdadero en el corazón cuando soñamos en el nuevo año.
Esta es probablemente la razón por la que hacemos resoluciones de año nuevo, cosas que queremos lograr, aprender o mejorar sobre nosotros mismos. Después de todo, Dios nos creó para mejorar y progresar. Pero tomar una resolución es una cosa; mantenerlo puede ser mucho más difícil. ¿Cómo podemos evitar desanimarnos cuando las cosas no salen como planeamos o esperábamos? Siempre ayuda tener a alguien que conozca nuestro objetivo y nos anime.
Fuente: Música y Palabras de Inspiración (Music and the Spoken Word)