Nota de prensa

Una perspectiva más elevada

Desde una perspectiva más elevada podemos pensar con más claridad, ver en mayor detalle, y discernir con más exactitud

Desde un punto elevado de un lugar, uno puede ver a gran distancia. Si uno va a un punto alto y eleva su perspectiva, puede orientarse de un modo que no resulta posible desde los niveles más bajos.

Por ejemplo, ¿ha estado alguna vez en un laberinto del cual tuvo problemas para salir? Si hubiera subido hasta un punto elevado, le habría resultado muy fácil ver dónde estaba y cómo llegar a su destino.

La vida puede ser así. A veces es confuso desde el nivel de la calle estruendosa, agitada, y llena de distracciones. Tal vez necesitemos buscar nuestros puntos elevados, espiritual y emocionalmente hablando, desde donde podemos ver más allá de lo que tenemos frente a nuestros ojos. Desde una perspectiva más elevada podemos pensar con más claridad, ver en mayor detalle, y discernir con más exactitud. Los problemas que parecían ser gigantescos, de pronto se ven un poco más pequeños y manejables.

Quizá no podamos permanecer en esa posición elevada para siempre; después de todo, la vida debe tener sus altibajos. Pero una vez que vemos las cosas desde una perspectiva superior, enfocamos la vida de un modo diferente. Tratamos de ser más bondadosos, de perdonar más y de ser más compasivos con los demás y con nosotros mismos. Nos aferramos un poco más a la esperanza y a la fe, aun en medio del desconsuelo, y, por encima de eso, volcamos más nuestro corazón al Señor, tras haber echado una mirada a nuestra vida, aunque brevemente, desde una perspectiva más próxima a la de Él.

Quizá es por eso que el profeta Isaías dijo: “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado; llamadle en tanto que está cercano… Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dice Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”.

En cualquier otro lugar de la tierra, los cielos están siempre a nuestro alcance. Podemos hallar nuestra senda hacia el Señor y a Sus pensamientos y caminos más altos al observar la vida desde una perspectiva más elevada.

Fuente: Música y Palabras de inspiración (Music and the Spoken Word)

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