El maestro orientador es un hombre al que se le asigna ayudar a otros miembros de su barrio o rama Santo de los Últimos Días y velar por ellos. Se asigna a dos maestros orientadores a cada persona o familia de la congregación; esos dos poseedores del sacerdocio visitan a las personas o familias asignadas cada mes para ayudarles y apoyarles en su esfuerzo por vivir los principios que Jesucristo enseñó.
En esa visita regular se da un mensaje de instrucción espiritual que se adapta para satisfacer las necesidades y preocupaciones de las personas o familias. Los maestros orientadores también se aseguran de que se satisfagan las necesidades temporales de los miembros.
“La orientación familiar no es tan sólo otro programa; es la manera en que el sacerdocio vela por los santos y lleva a cabo la misión de la Iglesia. La orientación familiar no es simplemente una asignación; es un llamamiento sagrado”, dijo Ezra Taft Benson, anterior Presidente de la Iglesia.
La orientación familiar se complementa con el programa de maestras visitantes para atender las necesidades de los Santos de los Últimos Días. Las maestras visitantes son dos mujeres a quienes se les asigna visitar a una mujer de su congregación.
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