Adolescentes Santos de los Últimos Días se reunieron el sábado 11 de mayo de 2024 para armar 91 camas nuevas para Las Vegas Rescue Mission (LVRM, por sus siglas en inglés) en el centro de Las Vegas. También desarmaron camas viejas a fin de reutilizarlas para los niños de East Valley Family Services.
“Durante años, he intentado desesperadamente que se compraran estas camas a través de diferentes organizaciones”, dijo Heather Williams, directora de desarrollo de LVRM. “El hecho de que hoy ustedes estén aquí para armar esas camas y que esto ya esté solucionado es una bendición increíble”.
Las camas se compraron gracias a una donación de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
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LVRM, que comenzó en 1970 y ocupa dos manzanas en el centro de Las Vegas, ayuda diariamente a cientos de hombres, mujeres y sus hijos, proporcionándoles aproximadamente 30 000 comidas cada mes.
Debbie Karnafel, coordinadora de voluntarios de SirveAhora del evento, dijo que estaba complacida por el número de jóvenes que acudieron a ayudar a los vecinos necesitados de su comunidad.
“Estábamos muy preocupados porque es mayo, tenemos graduaciones y todas esas cosas que ocurren en mayo. Es increíble”, dijo Karnafel. “[Pensamos], ‘solo vamos a intentarlo’, y mira lo que pasó. Todos se unieron a pesar de tener partidos de fútbol y cualquier otra cosa que tuvieran que hacer. Pudieron apartar cuatro horas de su apretada agenda y venir aquí a servir”.
“Esperábamos tal vez unos cien [jóvenes]”, dijo Williams. “Y luego, cuando comenzamos a ver que el número aumentaba, dijimos: ‘Oh, caramba, ¿cómo vamos a manejar todo esto?’, pero todo el mundo simplemente se presentó y realizaron rápidamente el trabajo. Nunca antes había visto algo parecido”.
El voluntario Cameron Steed apreció la oportunidad de retribuir algo a su comunidad.
“Esta es una oportunidad para nosotros […] de proporcionar un lugar de descanso para las personas que puedan estar sufriendo de adicción a las drogas o que estén pasando por rehabilitación o simplemente padeciendo un trauma. Esto les da la oportunidad de tener un lugar al que llamar hogar durante un par de noches al año”, dijo Steed. “Hemos pasado un rato maravilloso y ha sido bueno trabajar juntos”.
Otra voluntaria, Alexis Holyoak, dijo que la oportunidad de servicio la ayudó a apreciar sus bendiciones cotidianas.
“Hacer algo que podríamos dar por sentado para alguien que está muy agradecido de tener una cama para dormir por la noche es realmente estupendo”, dijo ella.
Caroline Stoddard, otra voluntaria, dijo que el servicio fue un tiempo bien empleado.
“Es realmente satisfactorio ver nuestro resultado final, con todo el trabajo que hicimos esta mañana y lo que conseguimos”, dijo Stoddard.
Williams dijo que está “más que agradecida” por lo que estos jóvenes lograron en tan poco tiempo y por cómo eso bendecirá vidas. Quienes necesitan los importantes servicios de LVRM ya no dormirán en colchones hundidos.
“Hemos pasado muchos años tratando de poner todas estas camas en nuestro centro y asegurarnos de que estamos sirviendo a la comunidad lo mejor posible”, dijo Williams. “No hay nada mejor que una buena noche de sueño, todos lo sabemos. Este ha sido un proyecto esencial que hemos necesitado durante mucho tiempo. Esta noche nuestros huéspedes van a volver y van a poder dormir en un colchón nuevo; solo sé que su estado de ánimo va a cambiar cuando regresen al centro”.
El élder Thomas A. Thomas, Setenta de Área, dijo a los jóvenes que servir a los necesitados de esta manera es exactamente lo que haría Jesucristo.
“Uno de mis pasajes favoritos de las Escrituras es: ‘Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar’”, dijo el élder Thomas, citando Mateo 11:28. “Y lo que les dije a los jóvenes es que si hay algún lugar en Las Vegas donde tenemos personas que están trabajadas y muy cargadas, esas son las personas a las que se sirve en Las Vegas Rescue Mission; y cuando pueden venir aquí y hacer posible la instalación de todas estas camas, están proporcionando descanso a las personas que más lo necesitan, incluidas las familias con niños que acuden a este centro”.
Proyectos como estos, dijo el élder Thomas, son perdurables, memorables y unificadores.
“Los jóvenes recordarán exactamente dónde estaban en un hermoso día de verano y lo que hicieron”, dijo él, “y dentro de unos años se sentirán identificados con la misión de Las Vegas Rescue Mission. Estamos agradecidos de tener estas organizaciones en la comunidad que nos permiten efectuar la obra de Cristo y venir aquí a prestar servicio a estas personas maravillosas que necesitan tanto esta misión”.