Urgen a buscar la paz en el hogar

El mundo en el que vivimos nos nos empuja a vivir en forma apresurada. Hay siempre más para hacer y más que lograr; sin embargo, muy dentro de nosotros necesitamos un lugar de refugio donde reine la paz y la tranquilidad, un lugar donde podamos descansar y recobrar las fuerzas con el resistir y sobrevivir a las presiones de la vida.

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días enseña que el lugar ideal para tener paz es dentro de las paredes de nuestro hogar, donde hemos hecho todo lo posible para que los principios del Evangelio del Señor Jesucristo sean enseñados. 

El cumplimiento de ese consejo no descansa sólo en los padres, aun cuando es suya la función de guiar. Los hijos también son responsables de hacer un mayor esfuerzo para vivir principios que fomenten paz y tranquilidad en el hogar. Es importante que los padres les enseñen a darse cuenta de cómo sus acciones repercuten en todas las demás personas que viven allí. Los niños a quienes se les hace responsables por sus actos, ya sean rectos o no, llegan a ser ciudadanos responsables en la comunidad.

Al centrar el hogar en principios que se encuentran en la escrituras, se convertirá naturalmente en un refugio, no sólo para la familia, sino también para aquellos amigos que vivan circunstancias difíciles, quienes se sentirán atraídos por la tranquilidad que reina allí. Acoge a esos amigos en su casa. Ellos mejorarán mucho en ese ambiente centrado en las enseñanzas de Cristo. Hágase amigo de los amigos de sus hijos y sé para ellos un buen ejemplo.

No debemos preocuparnos si no podemos hacer todo al mismo tiempo. El Señor también ha hablado en la Biblia de un tiempo y una época para todas las cosas. En respuesta a nuestras oraciones sinceras pidiendo guía, Él nos dirigirá para saber en qué debemos hacer hincapié durante cada etapa de nuestra vida. Podemos aprender, progresar y llegar a ser como Él, paso a paso, en forma constante.

Si existen dificultades en la familia no hay mejor tiempo para empezar una corrección que ahora mismo. Los padres son responsables para iniciar tales cambios e incluir a los hijos en el proceso. Dentro de poco tiempo se notarán diferencias en la familia y con consistencia de la aplicación de principios correctos se realizará la meta de paz, tranquilidad y amor en el hogar.   

Adaptado de un discurso de Richard G. Scott, 6-2013.