Las máquinas de donativos propagan la alegría navideña en el Polo Norte

De los más de cien lugares en todo el mundo que este año tienen máquinas de donativos de Ilumina el Mundo, ninguno es más interesante que la Casa de Papá Noel en el Polo Norte, Alaska.

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“Siempre es mejor dar que recibir. Eso es realmente cierto”, dijo un emocionado Papá Noel durante la ceremonia de inauguración de la Casa de Papá Noel el viernes 22 de noviembre de 2024. “No quiero que escuchen nunca a los detractores. Den lo que puedan, cuando puedan y como puedan. La verdad es que, cuando damos, nos sentimos físicamente más saludables. Es bueno para la mente. Es bueno para el espíritu. Simplemente es bueno para todos”.

Desde 2017, estas máquinas expendedoras benéficas patrocinadas por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días han sido una forma significativa de compartir el amor de Jesucristo con personas de todo el mundo. Este es el primer año que las máquinas han llegado a Alaska. 

“Gracias por traer estas [máquinas] aquí, a nuestra comunidad”, dijo el alcalde de Polo Norte, Larry Terch. “Es excepcional. Y gracias a todos los que donarán este año a las maravillosas organizaciones benéficas de nuestra comunidad local. Significa mucho para todos nosotros”. 

“[Las máquinas de donativos] son en realidad parte de la ruta móvil de Alaska”, explicó Angela Jones, codirectora de la máquina de donativos de Ilumina el Mundo en Fairbanks y el Polo Norte. Después de tres semanas en la Casa de Papa Noel, las máquinas expendedoras se llevarán a Anchorage, la ciudad más grande de Alaska, por otras tres semanas. 

Más de 500 organizaciones locales e internacionales sin fines de lucro participan en la iniciativa de las máquinas de donativos de este año. Los artículos disponibles incluyen alimentos, alojamiento, ropa, atención médica, educación, capacitación laboral y profesional, y cría de animales. 

La YMCA de las Fuerzas Armadas (ASYMCA, por sus siglas en inglés) de Alaska es una de las organizaciones benéficas locales a las que la gente puede donar en la Casa de Papa Noel. 

“Sabemos que nuestros militares y sus familias se enfrentan a una situación un poco más difícil que los que elegimos Alaska como nuestro hogar”, dijo Sarah Riffer, directora ejecutiva de ASYMCA. “A menudo están lejos de sus amigos. A menudo están lejos de su familia. No siempre cuentan con esa red de apoyo. Y es un honor para nosotros poder servirles y ayudarles a resolver sus problemas mientras están destacados aquí”. 

Otra organización benéfica es el Centro de Detección de Cáncer de Mama de Alaska (BCDC, por sus siglas en inglés), que ofrecen mamografías gratuitas para aquellas personas que no pueden pagar una. Y su camión móvil de mamografías llega a las mujeres de las aldeas rurales. 

“Soy alaskeña de quinta generación, y mis hijos pueden ayudar en la organización sin fines de lucro en la que trabajo [así como] en el banco de alimentos y en otras organizaciones sin fines de lucro”, dijo Jacyn DeBaun, directora ejecutiva de BCDC. “Es muy importante educar a nuestros hijos de manera que sepan lo importante que es la comunidad, que sepan lo importante que es retribuir, y es realmente maravilloso poder hacerlo en el momento perfecto del año para dar a los demás”. 

Los clientes también pueden donar al Centro para Personas Mayores de Fairbanks, que se compromete a brindar apoyo a las personas mayores para que vivan con dignidad e independencia. 

“Con grandes corazones de oro, nos hemos unido para apoyar muchos programas maravillosos de nuestra comunidad”, dijo Ashley Edgington, coordinadora de voluntarios del centro. “Es importante reconocer que el hilo común entre todos los que nos encontramos aquí es que somos o seremos personas mayores algún día… Gracias por bendecir a nuestra comunidad con esta máquina de donativos”. 

El élder Mark A. Bragg, Presidente del Área Norteamérica Oeste de la Iglesia, estuvo en la inauguración. Dijo que la labor que estas y muchas otras organizaciones benéficas llevan a cabo en Alaska es la obra de Jesucristo. 

“Simplemente salen y hacen el bien”, dijo el élder Bragg. “Jesucristo es la luz del mundo. Estamos aquí gracias a Él. Estamos aquí porque queremos bendecir a los demás. Es lo que Él haría. Es lo que Él hizo. Es lo que Él hace. Y nosotros somos una pequeña parte de eso. Ruego humildemente que el Señor los bendiga para que sepan cuánto bien están haciendo. Que Él los bendiga para que sepan que están haciendo grandes cosas, que están haciendo Su obra al bendecir a los demás”.