Al llegar un nuevo año hay muchas personas que deciden hacer cambios en la vida, incluso visitar a otra iglesia. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días siempre da la bienvenida a todos los visitantes a sus servicios de adoración, y para las personas que visitan por primera vez, la siguiente información puede ser útil.
| Un derecho humano fundamental es el derecho a la propiedad. 2013 Intellectual Reserve, Inc. Todos los derechos reservados | 1 / 6 |
Junto con las actividades y programas durante la semana, los Santos de los Últimos Días se reunen los domingos para la reunión sacramental, de aproximadamente una hora de duración, donde toda la familia participa de la Santa Cena, (similar a recibir la comunión), oran, cantan himnos y escuchan discursos presentados por los miembros mismos de la congregación. Además, hay clases para adultos, jóvenes, y niños después de la reunión sacramental en que se enseña el evangelio de Jesucristo de las escrituras.
Los mormones son por lo general un pueblo amigable, por lo que un visitante no debería sorprenderse que alguien, al ver una cara nueva, venga a hablarle, ofrecer la mano y ayudar a que el visitante se sienta cómodo.
¿Dónde estas reuniones se llevan a cabo?
En la mayoría de las áreas, el propio centro de reuniones es un edificio fácilmente reconocible y uniforme con el nombre de la Iglesia en el exterior. En el interior, se encuentra la capilla con bancas para la congregación y un podio para los oradores. Normalmente hay aulas y un gimnasio también. Caracterizado por la sencillez y la funcionalidad (con pinturas sencillas del ministerio de Cristo que adornan los pasillos y aulas), centros de reuniones sirven para muchos propósitos, y se utilizan para los servicios de domingo, eventos culturales, cenas y hasta refugios de emergencia. En otras áreas, los servicios de adoración pueden tener lugar en espacios más pequeños, alquilados que mejor se adapten a las necesidades de los miembros de la congregación local.
¿Quién asiste a los servicios?
Congregaciones locales están geográficamente designadas para llevar vecinos y comunidades más juntos y darles mayores oportunidades de servir a los demás. En consecuencia, el número de asistentes puede variar dependiendo de la ubicación. Puede ser una reunión íntima de una docena de un pueblito hasta una congregación de cientos de personas en Ciudad Guatemala. Típicamente, los límites geográficos son mantenidos en una manera que mantiene las congregaciones en una capacidad que permite la familiaridad y la comunidad. Generalmente, las familias se sientan juntos, pero un gran número de miembros solteros asisten también y en las grandes metrópolis incluso hay congregaciones especialmente designados para los adultos solteros.
¿Los visitantes tienen que participar?
Los visitantes simplemente pueden sentarse y disfrutar del servicio, o cantar junto la congregación con los himnarios prestados, si lo desea. No hay ninguna placa de recogida o de materiales que son necesarios para llevar.
¿Qué ropa usa la gente?
Le invitamos a usar cualquier ropa que usted se sienta cómodo asistir a un servicio religioso. Los hombres pueden vestirse de traje y corbata, y las mujeres llevan vestidos o faldas. Los niños también se visten de ropa apropiada. Pero no es necesario comprar ropa nueva si uno no tiene "ropa de domingo". Ropa limpia y modesta es aceptable.
¿Qué acerca de los templos?
Un error común entre los que no son de la fe mormona es que sólo los miembros dignos pueden entrar a sus capillas. Esto es más probable basado en un malentendido acerca de los templos y capillas. Mientras que los templos, de los cuales hay 151 (incluyendo los ya existentes y los anunciados o en construcción) en todo el mundo, están abiertas sólo a los miembros de la Iglesia que están totalmente comprometidos con su fe, cualquier persona puede entrar en una capilla mormona para visitar o adorar con sus vecinos miembros de la Iglesia. Hay más de 18.000 capillas por todo el mundo.
A todos le damos la bienvenida y nos dará gusto en encontrarle a usted y su familia en una reunión de la Iglesia. No hay ningún compromiso y creemos que va a tener una experiencia buena.