Se transfiere a la Iglesia de Jesucristo la responsabilidad y propiedad de sitios sagrados y documentos históricos

Una declaración conjunta de la Comunidad de Cristo y La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Se ha publicado una sección de preguntas frecuentes y un apéndice.

Hoy, martes 5 de marzo de 2024, la responsabilidad y propiedad del Templo de Kirtland, varios edificios históricos en Nauvoo y varios manuscritos y objetos se transfirieron oficialmente de la Comunidad de Cristo a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por un monto acordado. Mancomunadamente, compartimos el interés y la reverencia por estos sitios y artículos históricos, y estamos comprometidos a preservarlos para las generaciones futuras.

Las conversaciones que llevaron a este acuerdo histórico comenzaron en junio de 2021. “Este intercambio de bienes es significativo para nuestra iglesia”, dijo Stephen M. Veazey, presidente de la Comunidad de Cristo. “Mediante el aumento de los fondos de dotación, la Comunidad de Cristo tendrá mayor capacidad para cumplir con nuestras prioridades misionales en todo el mundo, incluso para seguir cumpliendo los propósitos divinamente previstos para nuestro templo en Independence, Misuri”.

“Nos sentimos profundamente honrados de asumir la mayordomía de estos lugares, documentos y objetos sagrados”, dijo Russell M. Nelson, Presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. “Agradecemos a nuestros amigos de la Comunidad de Cristo por su gran cuidado y cooperación en la preservación de estos tesoros históricos hasta el momento. Estamos comprometidos a hacer lo mismo”.

El Templo de Kirtland seguirá siendo un edificio histórico. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días planea volver a abrirlo el 25 de marzo de 2024 para recorridos públicos sin costo alguno. Del mismo modo, en Nauvoo, la Finca de la familia Smith, la Mansión de Nauvoo y la Tienda de ladrillos rojos también se volverán a abrir el 25 de marzo de 2024, para recorridos públicos durante todo el año sin costo alguno. Más información detallada sobre la transacción, los activos y los demás artículos incluidos en el acuerdo estará disponible próximamente.

La transferencia histórica pone de relieve nuestro prolongado esfuerzo por preservar el legado religioso y cultural, y fomentar las respectivas oportunidades de crecimiento y servicio al mundo.

La Comunidad de Cristo es una comunidad religiosa internacional dedicada a fomentar conexiones auténticas de unos con otros, y con Dios. Se esfuerza por restaurar la paz de Cristo en la tierra y desafiar sistemas injustos que atentan contra el valor humano. La Comunidad de Cristo afirma el valor intrínseco de cada persona y proporciona un lugar donde pertenecer, ser amado y valorado, crecer espiritualmente y descubrir un propósito que puede cambiar vidas y comunidades.

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, una religión mundial, enseña que nuestro Padre Celestial y Su Hijo Jesucristo han llamado nuevamente a un profeta viviente y han restaurado la autoridad y los convenios del sacerdocio para bendecir a las familias y a las personas con gozo. Los miembros procuran vivir y compartir el Evangelio de Jesucristo, cuidar de los necesitados y unir a las familias por la eternidad. Valoran el Libro de Mormón y la Biblia como Escrituras sagradas.