La siguiente declaración se atribuye a Sam Penrod, portavoz de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Setenta misioneros de tiempo completo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se encuentran a salvo después de un grave incidente ocurrido el viernes 12 de noviembre de 2021, durante una conferencia de zona en Torreón, México. Dos hombres entraron en un centro de reuniones de la Iglesia provistos de armas y exigieron la entrega de los teléfonos celulares, tabletas y billeteras. Los ladrones intimidaron a las trece hermanas y a los cincuenta y siete élderes, algunos de los cuales fueron golpeados o pateados durante el incidente. El presidente de misión y su esposa también fueron agredidos y amenazados con un cuchillo.
Después de que los hombres huyeran del lugar, se llamó de inmediato a la policía local, nadie requirió atención médica adicional. Un terapeuta de la Iglesia viajó desde la Ciudad de México para ayudar con las necesidades emocionales, también se pusieron a disposición otras opciones de terapia profesional. La Iglesia se está poniendo en contacto con los padres y se anima a los misioneros a que se comuniquen con sus familias.
Se ha retirado a los misioneros de la zona donde se produjo el incidente y se les ha indicado que extremen las precauciones. Un oficial de seguridad de la Iglesia se encuentra en Torreón para evaluar la situación. Nuestras oraciones están con estos misioneros y sus familias mientras se recuperan de esta experiencia atemorizante y traumática.