Si bien muchos elementos de la sesión del sábado por la tarde de la 191a Conferencia General Semestral del 2 de octubre todavía diferían de las conferencias anteriores al COVID-19, algunas escenas conocidas surgieron de los procedimientos.
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Aunque los líderes de la Iglesia todavía estaban sentados con rostros parcialmente cubiertos por mascarillas faciales, lo hicieron desde el espacioso auditorio del Centro de Conferencias, una vez más. Y a pesar de haber muchos asientos vacíos, los que discursaron fueron nuevamente rodeados por los atuendos coloridos de los miembros del coro. En esta sesión, un coro multicultural compuesto por multiples congregaciones de Santos de los Últimos Días de alrrededor de Utah, ofreció música en vivo durante toda la sesión.
Y a pesar de la continua interrupción de las prácticas "normales" de la conferencia, los espectadores pudieron escuchar los consejos y el aliento de los líderes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días para ayudarlos a aumentar su fe en el Salvador Jesucristo y Su evangelio.
Además de los comentarios de tres apóstoles, un miembro de la presidencia general de la Primaria y cuatro Setenta Autoridades Generales, el presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia, presentó cambios de liderazgo durante la sesión del sábado por la tarde.
Seis Setenta Autoridades Generales fueron relevados y se les otorgó el estatus de emérito a los siguientes líderes: el élder J. Devn Cornish, el élder Timothy J. Dyches, el élder David F. Evans, el élder Robert C. Gay, el élder James B. Martino y el élder Terence M. Vinson.
El presidente Eyring destacó la muerte del élder Dean M. Davies en agosto. El élder Davies se había desempeñado como Setenta Autoridad General durante un año y como consejero en el Obispado Presidente de la Iglesia durante ocho años. Habría sido relevado como Setenta Autoridad General en esta conferencia general.
El presidente Eyring también reconoció el llamado de dos nuevos Setenta de Área y el relevo de otros dos durante la reunión de liderazgo el jueves 30 de septiembre.
El coro, dirigido por el director musical Jamie Kalama Wood y acompañado por la organista Linda Margetts y que representa a 39 países y 35 idiomas en seis continentes, interpretó “¡Hark, All Ye Nations!”. "Considere los lirios" y "Este es el Cristo". Después de la sesión, el presidente Russell M. Nelson y su esposa, la hermana Wendy Nelson, agradecieron a los miembros del coro.
Los cuatro Setenta Autoridad Generales que hablaron durante la sesión del sábado por la tarde, el élder Ciro Schmeil, el élder Erich W. Kopischke, el élder Christoffel Golden y el élder Moisés Villanueva, grabaron sus mensajes desde sus áreas de asignación alrededor del mundo. Los cuatro están sirviendo en presidencias de área en África, Europa y el Caribe.
En sus comentarios, el élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, invitó a los oyentes a meditar sobre las bendiciones prometidas a los discípulos de Jesucristo que guardaran los convenios.
El pueblo del convenio del Señor está armado con justicia y con el poder de Dios en gran gloria, como lo vio Nefi (1 Nefi 14:14), dijo. “He sido testigo de la fe, el coraje, la perspectiva, la perseverancia y el gozo que se extienden mucho más allá de la capacidad mortal, y que solo Dios puede proporcionar”.
El élder Ronald A. Rasband compartió siete “cosas de mi alma” o cosas que él cree que le dan un propósito a su vida y obra en el Evangelio.
Sus cosas del alma: Amar a Dios el Padre ya Jesucristo, el Salvador. Amar a los vecinos. Amarse a uno mismo. Guardar los mandamientos. Sea siempre digno del templo. Sea alegre y lleno de gozo. Siga al profeta viviente de Dios.
Luego invitó a las personas a identificar sus propias ocho, nueve y diez "cosas del alma".
"Considere las formas en que podría compartir sus 'cosas' sinceras con los demás y anímelos a orar, meditar y buscar la guía del Señor", dijo el élder Rasband.
El élder Gary E. Stevenson habló de cómo el evangelio de Jesucristo es simplemente hermoso y maravillosamente simple, pero el mundo no lo es. “Jesucristo mismo describe que su yugo es fácil y ligera su carga (Mateo 11:30). Todos debemos esforzarnos por mantener el Evangelio sencillo, en nuestra vida, en nuestra familia, en nuestras clases, cuórumes, barrios y estacas ”.
En su primer discurso en la conferencia general desde que fue llamada a la presidencia general de la Primaria en abril, la hermana Susan H. Porter testificó que conocer y sentir el amor del Padre Celestial tiene el poder de cambiar muchos aspectos de la vida, incluyendo la forma en que alguien percibe la adversidad, los mandamientos , otros y su propia capacidad.
“Cuando sabes y comprendes cuán completamente eres amado como hijo de padres celestiales, todo cambia”, dijo.
En su mensaje pregrabado del Área África Sur, el élder Schmeil testificó que el discipulado es un viaje, no una competencia. “Estamos aquí para amarnos y ayudarnos unos a otros”.
El élder Kopischke, quien está sirviendo en Europa, compartió las luchas de su familia con las enfermedades mentales y ofreció aliento y esperanza a otras personas que luchan. “Para todos los que se ven afectados personalmente por una enfermedad mental, manténganse firmes en sus convenios, incluso si no sienten el amor de Dios en este momento. Haz todo lo que esté en tu poder y luego "quédate quieto ... para ver la salvación de Dios, y que su brazo sea revelado" (Doctrine y Convenios 123: 17).
Desde su asignación en África, el élder Golden habló a los oyentes de la necesidad de prepararse para la segunda venida de Jesucristo.
"Para aquellos que tienen ojos para ver, oídos para oír y corazón para sentir, más que nunca, se nos exige que confrontemos la realidad de que nos estamos acercando, cada vez más, a la Segunda Venida de Jesucristo".
Y el élder Villanueva, quien fue llamado en abril y está sirviendo en el Caribe, habló del dolor de perder a varios seres queridos durante la pandemia y testificó de la compasión perfecta del Salvador. “[El Salvador] no nos culpa por nuestra miopía, ni por estar limitados a la hora de visualizar nuestro viaje eterno. Más bien, se compadece de nuestra tristeza y sufrimiento ”.
El presidente Dallin H. Oaks dirigió la sesión y el élder William K. Jackson, Setenta Autoridad General, y la hermana Rebecca L. Craven, segunda consejera de la presidencia general de las Mujeres Jóvenes, ofrecieron oraciones.