Los comités del himnario y del libro de Canciones para los niños han estado asombrados por la respuesta al anuncio mundial de junio de 2018 de que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días revisaría el himnario actual, así como el libro de Canciones para los niños.
Miembros de la Iglesia de 66 países compartieron casi 50 000 sugerencias y más de 16 000 himnos, canciones y textos originales.
El élder Ulisses Soares, del Cuórum de los Doce Apóstoles, y un asesor de los comités de revisión dijeron que los comités nunca esperaban una respuesta tan increíble de los miembros de la Iglesia.
“Su dedicación y contribuciones nos llenan de humildad”. Él también dijo que no esperemos ver libros publicados en un futuro cercano. A pesar de que se ha progresado en el proceso de revisión, las nuevas colecciones de música todavía están a varios años de lanzarse.
Envíos originales
En junio de 2018, la Iglesia hizo un anuncio mundial con respecto al deseo de tener un nuevo himnario y un libro de Canciones para los niños que sean más apropiados para una Iglesia mundial. Como parte del anuncio, se invitó a los miembros de la Iglesia a enviar música sacra original para su consideración.
Steve Schank, Director de música de la iglesia y Presidente del Comité del himnario y del Comité del libro de Canciones para los niños, dijo que los comités recibieron aproximadamente 16 000 himnos y canciones originales a considerar para las nuevas colecciones, lo cual superó sus expectativas.
“Alrededor del 55 por ciento de los envíos fueron letras de de himnos e himnos, mientras que el restante 45 por ciento fueron canciones para niños y letras de canciones para niños”, dijo Schank.
“Estamos agradecidos por cada contribución que compartieron nuestros miembros y amigos que no son de nuestra fe”, dijo el élder Jeremy R. Jaggi, Setenta Autoridad General y asesor de los comités. “El gran volumen de las ofrendas refleja la fe y al amor de cada persona que contribuyó”.
El élder Jaggi dijo que todos los participantes debían sentirse satisfechos y apreciados por sus contribuciones, pero “al final, podremos publicar solo una pequeña parte de ellos”.
Proceso de revisión de los envíos
El proceso para revisar cada uno de los himnos y las canciones es el mismo.
Un equipo de voluntarios dedicados trabajaron durante meses para preparar los envíos de himnos y canciones para su revisión, lo cual incluyó quitar los nombres de los colaboradores de los documentos para asegurarse de que cada envío fuera revisado sin preferencias.
Los envíos se mandaron a lo largo del mundo para ser considerados con espíritu de oración en varias rondas por muchos músicos talentosos y expertos en texto.
En busca de la guía del Espíritu, cada revisor proporcionó comentarios sobre cuánto se ajustaron los envíos a la hora de cumplir con los requisitos para las inclusiones. Del 2 al 3 por ciento superior de los envíos luego pasa a los comités del himnario y del libro Canciones para los niños.
Una vez que los comités hayan llegado a un consenso sobre qué piezas cumplen mejor las metas de la música sagrada, los asesores de los comités y otros líderes de la Iglesia, incluso los miembros de cada Presidencia General revisarán sus recomendaciones.
Al final, la Primera Presidencia y el Cuórum de los Doce Apóstoles decidirán qué himnos y canciones se incluirán en las nuevas colecciones de música.
“Consideramos que cada envío es una ofrenda sagrada que los miembros de la Iglesia han puesto sobre el altar”, agregó la hermana Cristina B. Franco, Segunda Consejera de la Presidencia General de la Primaria y asesora del Comité del libro de Canciones para los niños. “Ya sea que esa ofrenda se publique o no, sabemos que es una ofrenda del corazón.
Por ese motivo, todo himno y canción se considera con reverencia y con espíritu de oración durante todo el proceso de evaluación. Al final, muchos de ellos tal vez no lleguen a los nuevos libros, pero oramos para que el Señor bendiga a todos por igual por sus ofrendas.
Se informará a todas las personas que hayan enviado una selección musical para su consideración del estado de sus canciones cuando se complete el proceso de revisión.
Evaluación adicional de himnos y canciones
Si bien se agregarán nuevos himnos y canciones a las colecciones de música actualizadas, también se volverán a publicar muchas selecciones actuales.
Al mismo tiempo que se hizo la invitación de enviar obras originales, también se invitó a los miembros a participar en una encuesta que documentara comentarios positivos y negativos sobre los himnos y las canciones actuales, así como sugerencias para nuevos himnos y canciones.
Los comités han revisado los comentarios y las sugerencias, los cuales han ayudado a ofrecer información para sus recomendaciones.
Schank informó que el proceso de ordenar los himnos y las canciones actuales se ha completado en gran medida, pero aún hay mucho por hacer.
“Las primeras recomendaciones para los himnos y las canciones actuales ya han ido a los líderes superiores de la Iglesia, y hemos recibido sugerencias útiles.
Nuestros líderes están muy interesados y trabajan activamente en este proyecto y, en muchos casos, han dado consejos detallados y significativos en cuanto al contenido y el proceso de la revisión”, dijo Schank.
“Mientras tanto, los comités han seguido revisando cientos de himnos y canciones adicionales, incluso la música publicada en las revistas de la Iglesia durante varias décadas, así como la música sagrada que actualmente se usa en otras tradiciones de la fe cristiana.
Se ha completado la revisión administrativa de los nuevos envíos de música, pero el proceso de evaluación de esas selecciones es constante”, dijo él.
Se están considerando himnos y canciones que se tienen en alta estima en varias culturas, países e idiomas para las nuevas colecciones de música, así como canciones de diferentes religiones que están en línea con las enseñanzas de la Iglesia.
“No podemos exagerar el poder que tiene la música sagrada para unificar a los santos en todo el mundo”, dijo el élder Soares. “Al cantar del mismo grupo de himnos y canciones, todos los hijos de Dios, sin importar la etnia, el país, la cultura o el idioma, unirán sus voces en alabanza a nuestro Padre Celestial común y a Su Hijo Jesucristo”.
Continuó: “El Señor ha dicho que ‘la canción de los justos es una oración para mí, y será contestada con una bendición sobre su cabeza’ (Doctrina y Convenios 25:12). Al unificar nuestras voces como el cuerpo de Cristo, nuestro Padre nos bendecirá al unificar nuestro corazón de maneras sin precedentes”.
Una obra muy detallada
Por lo general, los himnarios de la Iglesia se han revisado cada 30 a 40 años. Debido a esto, se requiere un trabajo detallado para asegurarse de que las nuevas colecciones de música puedan satisfacer mejor las diversas necesidades de la Iglesia en la actualidad, dijo Schank.
Cada uno de los himnos y las canciones se somete a revisiones exhaustivas para determinar si es necesario realizar ajustes de música o texto.
Además, se deben negociar contratos de derechos de autor para todos los usos e idiomas en los que la Iglesia publique música sagrada.
También se ha creado una nueva fuente para la letra y se utilizará en las nuevas colecciones de música para alinearse mejor con la labor de identidad visual de la Iglesia.
Las pruebas y la investigación para entender mejor las necesidades de los miembros continúan ofreciendo información para todas las etapas del proyecto.
Aunque se ha progresado mucho desde el anuncio de revisión, del élder Adrián Ochoa, otro Setenta Autoridad General y asesor de los proyectos de revisión, dijo que los comités han tenido que adaptarse a cambios inesperados que han alterado su forma de pensar acerca de lo que son las nuevas colecciones de música, qué deben lograr y cuándo estarán disponibles.
“Algunas de las cosas que los comités no esperaban cuando comenzó este esfuerzo fueron varios cambios importantes que han sucedido en la Iglesia, tales como el bloque de dos horas y el modelo centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia para la adoración y el aprendizaje”, dijo del élder Ochoa.
“Estas instrucciones inspiradas, así como las adaptaciones a nuestro trabajo que se requieren en la situación del coronavirus, afectarán tanto el resultado como el tiempo que tomen las nuevas colecciones”.
Schank agregó que la pandemia “reforzó nuestro deseo de proporcionar recursos junto con el himnario para facilitar el uso de los miembros en casa.
Estos podrían incluir nuevos recursos para ayudar a los miembros a aprender y enseñar los himnos y las canciones, así como materiales de capacitación para los miembros y para aquellos que tienen llamamientos de música”.
Gratitud por las contribuciones de los miembros
La fecha límite ha pasado tanto en los envíos originales de canciones como en las sugerencias para la encuesta, y ahora Schank, en nombre de los comités, expresa agradecimiento por el tiempo y los talentos que los miembros han compartido con tanta voluntad para ayudar a bendecir a los hijos de Dios en todo el mundo.
“Las contribuciones de los miembros han sido abrumadoras”, agregó Schank, “y estamos sumamente agradecidos. Ahora estamos trabajando diligentemente para responder.
Para más información sobre las revisiones del himnario y el libro de Canciones para los niños, visite preguntas frecuentes en newmusic.ChurchofJesusChrist.org.