Se repite una interpretación del Coro de la Expo ’74 en la celebración del 50º aniversario

La celebración del 50^o aniversario de la Expo ’74, una feria mundial celebrada en Spokane, Washington, comenzó el sábado 4 de mayo de 2024. Como parte de la ceremonia de apertura, un coro regional de miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, interpretan una repetición del Coro mormón de la Expo ’74, ante más de 1500 asistentes.

El élder Mark A. Bragg, presidente del Área Norteamérica Oeste, asistió al concierto y sintió el poder de sus voces.

“Fue hermoso; fue poderoso, y cantaron con mucha confianza y gozo. Trajo esperanza y un espíritu a este festival que sé que todos pudieron sentir”, dijo el élder Bragg.

El coro estuvo bajo la dirección de Karlyn Brett, quien también fue la directora original del coro en 1974.

“Han pasado cincuenta años, pero eso hace que sea especial darnos cuenta de que todavía podemos hacer[lo]”, dijo Brett.

El coro de este año incluye a catorce miembros del coro original de 1974, hijos y nietos de los miembros del coro original, y miembros nuevos. Lara Voigtlaender, cuya madre estuvo en el coro original, dijo que tenía grandes deseos de tener esta experiencia en común con ella.

“La experiencia llega a lo más profundo del alma”, dijo Voigtlaender. “Esto es algo que mi mamá y yo siempre compartiremos: esa conexión de hacer algo que no solo nos conmovió a nosotras, sino a todos los que nos rodeaban”.

En 1973, Brett formaba parte de un comité de música de la región cuando Spokane fue seleccionada para albergar la feria mundial. En una reunión de planificación, se le preguntó lo que la Iglesia de Jesucristo podía exhibir en la Exposición.

Y ella dijo: “Bueno, ¿qué les parece un coro?”. Así que empezamos a convocar a las personas y se formó el coro. La gente quería participar en él”, dijo.

Brett también cree que Dios ayudó a que el coro se formara.

“El Señor lo había hecho posible y así lo quería; sería una oportunidad para expresar nuestros testimonios al mundo, y a las personas, que pertenecían. Teníamos a todos preparados para esta oportunidad”, dijo.

Una de las canciones favoritas que cantó el Coro de la Expo fue “Who Am I? [¿Quién soy yo?]”, esta se le quedó grabada a Voigtlaender desde que escuchó la canción cuando tenía seis años.

“En ese momento sentí el poder del mensaje: que somos hijos e hijas de un Padre Celestial que nos ama”, dijo. “Y así, a lo largo de mi vida, he podido reflexionar sobre lo que sentí. Espero de alguna manera, cerrar el círculo con ese recuerdo porque podré estar en la posición de quien comparte el mensaje, no solo de quien lo recibe”.

Jennet Siniff tampoco olvidó esa misma canción; ella también cantó en el coro de este año.

“Ni siquiera tengo que mirar la partitura, porque la música permaneció conmigo. Así que fue una experiencia maravillosa para mí y sirvió para fortalecer mi testimonio. Las canciones que cantamos… las palabras se me quedaron grabadas durante los últimos cincuenta años”, dijo.

Siniff se unió al coro al principio debido a su hija, Joyce Hawkins, quien estaba tomando clases de piano con Karlyn Brett.

“Cuando trabajas con Karlyn Brett, hay un gran nivel de expectativa de desempeño, de deber [y] dedicación; y ella fue mi maestra de piano. Sabía perfectamente lo que me esperaba, porque ella era muy exigente en las lecciones”, dijo Hawkins.

Hawkins fue una de las miembros más jóvenes del coro del 74; tenía dieciséis años, pero no se sintió nerviosa de cantar frente al mundo, en gran parte debido a la dirección de Brett.

“Su nivel de profesionalismo, lo que ofreció y su testimonio hicieron que fuera aún más gratificante ser parte de ese grupo. Realmente cantamos a un alto nivel, un alto nivel espiritual. Fue genial”, dijo Hawkins.

El nivel de profesionalismo y el talento de Brett ayudaron al coro a crear un legado que abarca generaciones.

“No creo que entendieron, ni siquiera contemplaron, el efecto que tendría el coro”, dijo Voigtlaender. “Creo que pensaron que era solo un coro local, que iban a cantar y que iba a quedar bien para la Expo. No creo que tenían idea de lo influyente y poderosa que iba a ser la música para tanta gente”.

Para Brett, la misión del coro no ha cambiado en cincuenta años:

“Todo el coro realmente espera que [las personas] sientan nuestro testimonio, nuestro espíritu; el amor que tenemos por el Evangelio y por Spokane”, dijo.