El presidente Jeffrey R. Holland del Cuórum de los Doce Apóstoles rededica la renovada Casa del Señor en su ciudad natal, St. George, Utah, el domingo 10 de diciembre de 2023.
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“Tengo la edad suficiente como para no saber cuántos momentos memorables me quedan, pero esta es, sin duda, una experiencia especial”, dijo el presidente Holland, quien estuvo hospitalizado varias semanas anteriormente este año. “[Se trata de una oportunidad] imprevista, no esperada, pero que valoro profundamente. Es una oportunidad especial para mí porque es el templo con el que crecí cuando era niño. Es donde fui bautizado, donde fui investido, es donde mi esposa y yo fuimos sellados”.
Lo que es más importante, dijo el presidente Holland, es que cada templo construido por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es una casa del Señor Jesucristo.
“El templo es un símbolo supremo de nuestro trayecto a lo largo de lo que en los últimos años comúnmente se ha denominado la senda de los convenios”, dijo el presidente Holland. “La experiencia universal absoluta es sentir que se está en la presencia de Dios, caminar por donde Él caminaría. Vamos allí para ser semejantes a Él. Vamos allí para sentir lo que Él era y lo que Él desea que seamos. Y por eso vamos a Su casa”.
Este templo de la época de los pioneros se cerró en noviembre de 2019 para ser ampliamente renovado. Esta fue la segunda renovación importante de este edificio histórico, que fue anunciado originalmente por Brigham Young en 1871. Los trabajadores reemplazaron los sistemas mecánicos, de plomería y eléctricos del templo, y fortalecieron su integridad estructural.
Esta renovación también eliminó incongruencias de diseño en el estilo arquitectónico que surgieron como consecuencia de renovaciones anteriores. El sitio del templo presenta nuevas plazas que mejoran el acceso a las entradas del templo y proporcionan espacios para la reunión de familias y amigos. La calle del lado norte del templo ahora es una plaza para peatones con jardines, asientos y una fuente de agua. Desde el lado este del templo los visitantes pueden sentarse en otra plaza con jardines y admirar su fachada principal.
“El paisaje que se encuentra alrededor del templo hace un uso sostenible del agua, y resulta conocido para los participantes que están familiarizados con el Templo de St. George”, dijo Andy Kirby, director de renovaciones históricas de templos de la Iglesia. “[Los jardines] son parecidos a un parque. Redujimos la superficie total de césped y aumentamos la de áreas vegetales, y utilizamos plantas adecuadas para este clima árido. También preparamos varias áreas con antelación para que las plantas estuvieran plenamente desarrolladas cuando se inaugurara y dedicara el templo, y ha quedado hermoso. Tengo muchas ganas de que las personas disfruten de los jardines del Templo de St. George”.
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Las ceremonias que se llevan a cabo en el interior de cada templo enseñan acerca del propósito de la vida y unen a las familias, pasadas y presentes. Los Santos de los Últimos Días prometen guardar los mandamientos de Dios, apoyar Su obra, vivir la ley mayor que Cristo enseñó mientras estuvo en la tierra, ser castos y dedicar su vida a edificar la Iglesia de Cristo.
“Debemos intentar conducirnos fuera del templo como lo hacemos dentro”, dijo el presidente Holland. “Debemos recordar los compromisos, las promesas, las esperanzas y los sueños. Si pudiéramos llevarlos con nosotros fuera del templo, cambiaríamos el mundo”.